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El sano masoquismo lector

Adriana Villegas Botero
03 de junio de 2025 - 05:05 a. m.
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Leo columnas que muchos abandonarían antes de terminar el primer párrafo. Señores que exaltan mujeres por su maternal ternura; que lloran porque se perdieron los valores, y que llaman “guerrillero” al presidente Gustavo Petro. Textos que usan la palabra “comunista” como adjetivo de odio. Gente que sueña un “Make Colombia Great Again”.

En mi ciudad, donde la godarria es maleza, hay un exalcalde que desde que llegó Petro firma sus columnas con una nota final, que en realidad es un conteo: “Manizales, Tercer Año del Régimen”. Otro señor, al que una amiga llamó “el calumnista”, describió así la manifestación del Gobierno en Barranquilla: “La primera línea terrorista; organizaciones sindicales; grupos guerrilleros; narcotraficantes y contrabandistas; gestores de paz; criminales excarcelados; vagos y desechables”.

No son rarezas de mi región, ni de un grupo generacional. En un pódcast de esos en los que acotan “no sé cómo se dice esto en español” entrevistaron durante casi dos horas a la exministra Marta Lucía Ramírez, quien pudo hacer propaganda de su hoja de vida porque no hubo ni un minuto para la Operación Orión, que desde 2002 tiene a madres buscando a sus hijos desaparecidos en La Escombrera, ni para explicar sus negocios privados con una playa pública de San Andrés.

(Ahora que los influencers dedicados a las relaciones públicas nos llenan de “contenidos”, es aún más urgente el periodismo que sabe hacerle preguntas difíciles a las fuentes pertinentes).

El Gobierno de Petro es pésimo, pero es peor la oposición: nula autocrítica y total sequía de ideas. Abundan relatos que pintan al país como la hecatombe de la que habló Álvaro Uribe Vélez, y al país de ese entonces como el modelo de la gente de bien al que hay que regresar: los de las camisas blancas y los buenos somos más. Versiones que ignoran el exterminio de la Unión Patriótica, los falsos positivos, Agro Ingreso Seguro y los exilios de Daniel Coronell y Alfredo Molano, por citar solo a dos de los muchos que tuvieron que huir de las balas que sí mataron al humorista Jaime Garzón, aunque su personaje Godofredo Cínico Caspa esté más vivo que nunca.

Los leo y me río, refuto, me ratifico o me aburro, pero los leo. ¿Para qué si, además, casi todos escriben sin gracia? Hay quienes piensan que los medios fallan al darle espacio a esas voces, por sectarias o excluyentes, pero en un mundo en el que el algoritmo moldeado a partir de clics en “me gusta” define el entretenimiento que recibimos en las redes, los medios aportan cuando nos sacan de la burbuja digital y nos recuerdan que aquellos que no nos gustan también existen. Hay sobrerrepresentación de algunos e invisibilidad de otros, pero la pluralidad exige aprender a vivir entre ideas contrarias, sin eliminarlas a punta de bala o cancelación.

Es claro que no puede haber espacio para los discursos de odio, pero la definición de discurso de odio es bastante restrictiva. No es discurso de odio todo lo que odio escuchar o me parece violento. Con mi diario masoquismo lector monitoreo al conservadurismo extremo por si algún día lo pillo en alguna idea atractiva, y gracias a eso afino mis propias convicciones: la agenda social, progresista y feminista necesita defensores, porque abundan quienes quieren recortarla. Para darse cuenta, basta con leer.

Adriana Villegas Botero

Por Adriana Villegas Botero

Periodista, abogada y doctora en literatura. Autora de los libros ‘El oído miope’, ‘El lugar de todos los muertos’ y ‘Sakas’. Profesora en la Universidad de Manizales. Ha recibido tres veces el Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar.
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Mario Giraldo(196)Hace 21 horas
Muy interesante reflexión, le voy a tomar prestada su frase de " haber si le pillo una idea atractiva.." muy simpatico el apunte.
Patricia Maria Llano Restrepo(tf440)Hace 22 horas
Muy bien! Hay que ser un tanto masoquistas lectores para no ser ignorantes o fanáticos
SÓTERO(26571)04 de junio de 2025 - 02:43 p. m.
Es por ahí.
alfonso Lopez Diaz(9763)04 de junio de 2025 - 11:05 a. m.
Qué bien! Felicitaciones!
Julio Enrique Galán Roa(83619)04 de junio de 2025 - 10:26 a. m.
Vale
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