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En un operativo liderado por la Policía Nacional en los departamentos de Nariño y Putumayo, las autoridades lograron las capturas de nueve presuntos integrantes de una red criminal dedicada al tráfico ilegal de madera, explotada en selvas y parques naturales de la Amazonía colombiana. Una actividad ilícita que les representaba ganancias de al menos $350 millones mensuales a los denominados Comandos de Frontera.
Las autoridades detallaron que la operación, denominada “Puerto Hong Kong”, fue realizada en coordinación con el Ejército Nacional. Las diligencias de registro y allanamiento en las que se efectuaron las capturas ocurrieron en los municipios de Orito, La Dorada y San Miguel (Putumayo), y en la ciudad de Pasto (Nariño). También intervinieron 15 puntos de comercialización ilegal de maderas en estas localidades.
En total, la Policía y el Ejército lograron la incautación de 378 metros cúbicos de maderas de distintas especies, extraídas especialmente del Parque Nacional Natural La Paya, ubicado en Puerto Leguízamo (Putumayo). Los capturados deberán responder por el delito de aprovechamiento ilícito de los recursos naturales, por afectar parques naturales y zonas de especial protección ambiental.
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El brigadier general José James Roa Castañeda, director de Carabineros y Protección Ambiental de la Policía, entregó detalles del operativo y las diligencias de allanamiento. También explicó el funcionamiento de la logística para sacar la madera de las zonas protegidas en las que era talada y llevarla hasta los sitios de comercialización en algunos casos urbanos.
“Mediante la ejecución de 15 diligencias de registro y allanamiento se logra la incautación de 378 metros cúbicos de madera de diferentes especies que lograron ser extraídos de esta zona de especial protección por parte de los ilegales. Este material forestal es transportado por el río Putumayo y llega al municipio de Puerto Asís para ser comercializado en el interior del país en ciudades como Pasto, Cali, Neiva, Bogotá y la República de Ecuador”, detalló el brigadier general Roa Castañeda.
Además del Parque Nacional Natural La Paya, los responsables de la tala indiscriminada de maderas en zonas protegidas también afectaban sitios de especial interés ambiental en el corregimiento de Tarapacá (Amazonas), el Parque Nacional Natural Amacayacu (Puerto Santander Amazonas) y el Parque Nacional Natural Río Pure (Amazonas), un sitio clave para la protección de los ríos Caquetá y Putumayo.
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“Esta acción operacional de la Policía Nacional representa un golpe significativo a las finanzas del Grupo Delincuencial Organizado Comandos de Frontera, quienes obtenían ganancias ilícitas de 350 millones de pesos mensuales a través del comercio ilegal de madera”, informaron desde la Policía Nacional.
La institución destacó el impacto de la operación para la protección de los bosques, el agua y la biodiversidad en la Amazonía colombiana. También el rol fundamental que tiene el Parque Nacional Natural La Paya, pues “previene la contaminación con combustibles del río Putumayo, el cual abastece de agua potable a comunidades indígenas y municipios del departamento”.
“Con esta actividad operacional se logra la desarticulación de redes criminales dedicadas a la explotación ilegal de recursos naturales, afectando su estructura logística y operativa, además esto nos permite seguir el rastro de otros y determinadores de esta organización criminal”, concluyó la Policía.
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Este golpe a los delitos ambientales se da justo en medio de la alerta que ha generado el comportamiento de las cifras de deforestación en sitios estratégicos, como las selvas de la Amazonía colombiana. Pese a que en 2023 el país tuvo la tasa de deforestación más baja en 23 años (80.00 hectáreas), en 2024 la cifra se disparó y el Ministerio de Ambiente registró hace poco un aumento del 35%, llegando a 107.000 hectáreas de bosques deforestados en el país durante el último año.
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