Así inició la defensa de Álvaro Uribe en nueva fase del juicio en su contra

Álvaro Uribe volvió al estrado judicial. Este lunes 5 de mayo, el expresidente rindió declaración en el juicio penal que enfrenta por los presuntos delitos de soborno a testigos y fraude procesal. El líder del Centro Democrático, quien se ha declarado inocente, compareció desde las 8:00 de la mañana en el complejo judicial de Paloquemao, en Bogotá, en el inicio de la fase en que su defensa presentará testigos para probar su inocencia.

Uribe interviene como primer testigo entre los 75 que presentará su equipo jurídico, encabezado por los abogados Jaime Granados y Jaime Lombana. Durante esta nueva etapa, la defensa busca contradecir la hipótesis de la Fiscalía, que lo señala de haber intentado manipular testimonios desde 2018 para favorecer su posición en un proceso por presuntos vínculos con grupos paramilitares que inició la Corte Suprema de Justicia.

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El ente investigador, representada por la fiscal Marlenne Orjuela, cerró el pasado 29 de abril su presentación de pruebas con un total de 37 testigos, además de material audiovisual, fotografías, audios y documentos. La tesis del ente acusador sostiene que Uribe, a través de terceros, buscó ar a reclusos con el fin de obtener declaraciones favorables.

En la audiencia también estuvieron los representantes de las presuntas víctimas: el senador Iván Cepeda, quien asistió personalmente, y, de manera virtual, el exfiscal general Luis Eduardo Montealegre y Deyanira Gómez, excompañera sentimental del testigo clave Juan Guillermo Monsalve.

Además del propio Uribe, figuran entre los testigos de la defensa su hermano Santiago Uribe, el exministro de Agricultura Andrés Felipe Arias, y los abogados Juan Felipe Amaya Mejía y Franklin Geovani Guevara Bernal. Se prevé que la declaración del exmandatario se extienda durante al menos dos jornadas.

Siendo las 5:02 p.m, terminó la primera jornada de declaración del expresidente Uribe. El exmandatario, quien se extendió por cerca de ocho horas, hizo un recapitulación de su carrera política, negó presuntos vínculos con la conformación del Bloque Metro de las AUC, y aseguró que, contrario a lo que ha dicho las víctimas acreditadas del caso, todo este caso ha sido una persecución política en su contra.

La declaración del exmandatario continuara mañana a las 8.30 a.m en el complejo judicial de Paloquemao. Luego de su intervención, el abogado Jaime Granados dará paso a los 75 testigos de la defensa.

En su declaración, Álvaro Uribe se refirió a los hechos ocurridos en febrero de 2018, cuando sostuvo una reunión con el entonces fiscal general Néstor Humberto Martínez. Según Uribe, ese 14 de febrero le entregó cartas apostilladas, tramitadas por su entonces abogado Diego Cadena, en las que varios presos en Estados Unidos expresaban su disposición a declarar en los casos judiciales contra su hermano Santiago Uribe y sobre el magnicidio del líder conservador Álvaro Gómez Hurtado.

Dos días después de ese encuentro, el 16 de febrero, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia publicó un auto en el que archivó la investigación que cursaba contra el senador Iván Cepeda y, en cambio, ordenó que se investigara a Uribe por presunta manipulación de testigos.

En relación con esa acusación, Uribe fue enfático: “Aquí no hay una sola prueba, aquí no hubo una sola intención de mandar a Diego Cadena a sobornar testigos”. Explicó que su primer encuentro con Cadena fue el 28 de febrero de 2017, en una reunión organizada por su primo Mario Uribe, pero aclaró que este no participó en el contenido de la conversación.

Según el expresidente, el único tema tratado fue el interés de algunos reclusos en declarar en procesos relacionados con Santiago Uribe y con Álvaro Gómez. Aseguró que en esa ocasión no se mencionaron ni Iván Cepeda ni los exparamilitares Juan Guillermo Monsalve y Pablo Hernán Sierra.

Al ser interrogado sobre las actividades de su entonces abogado, Uribe afirmó que nunca fue informado de gestiones adicionales por parte de Cadena. También reveló que, como parte del pago por sus servicios, le transfirió un lote de 2.060 metros cuadrados ubicado en zona semirrural de Montería (Córdoba).

Finalmente, insistió en que su interés era que los internos denunciaran presuntas presiones y beneficios que presuntamente ofreció el senador Cepeda para declarar falsamente en su contra. “Nunca he tenido información privilegiada en el estado colombiano, pido a colombianos presos que denuncien manipulaciones del senador Cepeda y si tienen algo que decir que lo denuncien”, afirmó.

El expresidente negó cualquier vínculo personal o o con Juan Guillermo Monsalve, principal testigo en su proceso por presunto soborno y fraude procesal. Uribe aseguró que solo tuvo conocimiento de Monsalve en 2011, cuando el testigo le concedió una entrevista al senador Iván Cepeda, en la que lo vinculó a él y a su hermano Santiago Uribe con la supuesta fundación del Bloque Metro de las Autodefensas en la hacienda Guacharacas.

La estructura paramilitar, según Monsalve, operó en al menos 45 municipios antioqueños, incluyendo Medellín, entre 1996 y 2002. “Este señor viene a hacer esas denuncias en 2011, ese señor fue puesto preso en el Gobierno que yo presidí. Yo vine a saber de él (Juan Guillermo Monsalve) cuando le da la entrevista a Iván Cepeda. ¿Qué pasó entre 1997, cuando terminó mi Gobernación de Antioquia, y 2011?, ¿por qué guardó tanto silencio, por tantos años?”, cuestionó Uribe durante su intervención.

El propio Monsalve ha declarado ante la Fiscalía que nunca tuvo o directo con el expresidente, salvo un breve encuentro en un acto de campaña política y otro en la inauguración de una cooperativa en San José del Nus, corregimiento del municipio de San Roque (Antioquia).

Uribe también rechazó haber intentado manipular testigos. “Nunca se me ha ocurrido buscar testigos para una cosa distinta a la de verificar sus testimonios”, afirmó, al tiempo que negó conocer al exparamilitar Pablo Hernán Sierra, otro de los que lo ha señalado.

En su relato, el exmandatario mencionó que en 2014 sostuvo una reunión con el abogado Wilser Molina —hoy alcalde de Amagá—, quien le advirtió que el senador Cepeda habría estado buscando testimonios en cárceles para afectarlo judicialmente. Según Uribe, Molina le entregó declaraciones extrajuicio de dos exparamilitares: Ramiro de Jesús Henao, alias Simón, y Gabriel Muñoz Ramírez, alias Castañeda. El expresidente aseguró que remitió dichas declaraciones a la Corte Suprema para que investigara.

Uribe también abordó el caso de su hermano, Santiago Uribe, absuelto en noviembre del año pasado tras años de proceso como presunto promotor del grupo paramilitar Los Doce Apóstoles. Juan Carlos Meneses, excomandante de la Policía en Yarumal, aseguró que en la hacienda La Carolina patrullaban hombres armados con fusiles R-15 y AK-47. Sin embargo, el expresidente afirmó que nunca conoció a Meneses y reiteró que su hermano fue exonerado por la justicia.

Uribe Vélez negó haber tenido cualquier relación con el exnarcotraficante Santiago Gallón Henao, conocido públicamente por estar vinculado al asesinato del futbolista Andrés Escobar en 1994, ocurrido tras el Mundial de Fútbol en Estados Unidos. Gallón Henao fue capturado en 2018 y ha sido señalado de financiar grupos paramilitares en Antioquia.

Una de las conexiones señaladas por la Fiscalía en este caso es que Gallón Henao fue quien adquirió la hacienda Guacharacas, propiedad de la familia Uribe Vélez, un terreno clave en el proceso por ser presuntamente el lugar de nacimiento del bloque Metro de las Autodefensas, según el testigo Juan Guillermo Monsalve.

Además, se ha vinculado a Gallón Henao con la creación de una empresa de seguridad llamada El Cóndor, que habría operado bajo la figura legal de las Convivir, asociaciones de vigilancia privada promovidas durante la gobernación de Uribe en Antioquia. Según las investigaciones, algunas de estas estructuras sirvieron como fachada para el accionar paramilitar.

En su intervención, Uribe defendió la legalidad de las Convivir y explicó que durante su istración se entregaron personerías jurídicas bajo los requisitos fijados por la Superintendencia de Vigilancia. Indicó que, de las 69 asociaciones creadas en Antioquia, cuatro presentaron irregularidades y fueron disueltas. “En Colombia hubo 700 Convivir y en Antioquia tuvimos 69, de ellas cuatro tuvieron problemas y a esas les quitamos la personería jurídica”, sostuvo.

“Yo sé que el tema de la seguridad de Antioquia es sensible para usted” intervino el abogado Granados y le preguntó a su cliente cuál era la situación de orden publico en el departamento cuando este asumió la gobernación en 1995. Uribe señaló que la situación era “dramática, como en muchas regiones de Colombia. Guerrilla por toda parte y había dos grupos paramilitares en Urabá, y lo que conocíamos en Antioquia como los paramilitares de Puerto Berrío o del Magdalena Medio”.

Acto seguido, el abogado Granados le preguntó sobre su política de seguridad para enfrentar esta problemática. “Usted tiene alguna pregunta sobre las Convivir, doctor Jaime”, contrapreguntó Uribe, a lo que la fiscal del caso, Marlenne Orjuela, solicitó una moción de orden al considerar que el expresidente estaba usando su intervención para dirigir el interrogatorio de su abogado defensor.

Durante su primera intervención en el juicio por soborno y fraude procesal, el expresidente Álvaro Uribe comenzó describiendo aspectos de su vida actual. Mencionó a su núcleo familiar y sus ocupaciones como empresario del sector agropecuario, docente universitario, líder del partido Centro

Luego hizo un repaso de su trayectoria en el servicio público: concejal de Salgar y de Medellín (Antioquia), director de la Aeronáutica Civil, senador, gobernador de Antioquia y presidente de la República entre 2002 y 2010. Uno de los ejes de su testimonio fue la hacienda Guacharacas, ubicada entre los municipios antioqueños de Maceo y Yolombó.

Contó que fue adquirida en 1977 por su padre, Alberto Uribe Sierra, y aseguró que nunca la istró. Dijo que tras el asesinato de su padre en 1983 dejó de ir al lugar y que la finca fue vendida en 1996, cuando era gobernador. Este predio es clave en el proceso, ya que el testigo clave, el exparamilitar Juan Guillermo Monsalve, asegura que allí se fundó el bloque Metro de las Autodefensas.

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