{ "@context": "https://schema.org", "@type":"Organization", "name":"El Espectador", "url":"", "logo":{ "@type":"ImageObject", "url":"/pf/resources/images/favicons/favicon-EE-152.png?d=1051", "width":"300" }, "Point": { "@type": "Point", "telephone": "018000510903", "Type": "Servicio al cliente" }, "sameAs":[ "https://www.facebook.com/elespectadorcom", "https://twitter.com/elespectador", "https://www.instagram.com/elespectador/", "https://www.youtube.com//Elespectadorcom?sub_confirmation=1" ]}
Publicidad

El Napoli

Jorge Tovar
26 de mayo de 2025 - 01:06 a. m.
Los jugadores de Napoli celebran el título de la liga italiana.
Los jugadores de Napoli celebran el título de la liga italiana.
Foto: EFE - CIRO FUSCO
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

La historia del Napoli, reciente campeón del fútbol italiano, es el relato del triunfo del sur sobre la industrializada Italia del norte. Nadie comprendió eso mejor que Diego Armando Maradona.

El Napoli, campeón en 1987, 1990, 2022 y 2025, no fue el primer equipo del sur que ganó el Calcio. Antes, en 1970, liderado por la prodigiosa zurda de Gigi Riva, el Cagliari había derrotado a las tradicionales potencias del norte. De Roma para abajo, la liga nunca había viajado al sur.... ni después, hasta la llegada de Maradona.

En 1984, el astro argentino llegó con el equipo más cerca del descenso que de la gloría que él se imaginaba. Pero una temporada después terminaron terceros para finalmente ser campeones en 1987. Su figura era tal que, según contó alguna vez Arrigo Sacchi, entrenador del mejor Milan de la historia, los días antes de enfrentar al Napoli, Baresi, Maldini, Gullit, Rijkaard, Van Vasten y compañía entrenaban nerviosos ante lo que se les venía.

Más allá del triunfo del Cagliari, aquella victoria napolitana del 87 fue el triunfo sobre un norte clasista y hasta racista con sus compatriotas a quienes, a modo de ofensa, tildaban de africanos. Las pancartas con las que se recibía al Napoli en el norte eran muy dicientes. Desde el “bienvenidos a Italia”, cuando cruzaban la imaginaria frontera de sur a norte, hasta el “Vesubio, haznos soñar”, el Napoli representaba, y lo sigue haciendo, esa población del sur de Italia que quiere y ha logrado demostrar al norte que no son vagos ni perezosos. Hoy son los mejores.

El Napoli de hoy es muy diferente al de Maradona. Tras la convulsionada salida del argentino, acusado de dopaje en 1991, el club napolitano comenzó una caída libre que concluyó con el descenso istrativo del equipo a la tercera división para la temporada 2004-05. Ya entonces, el director y productor italiano Aurelio De Laurentiis había adquirido el equipo por €40 millones, comprometiéndose a lidiar con la deuda que rondaba los €80 millones.

De Laurentiis, en sí mismo es un personaje particular. Cuando el equipo estaba en la Serie C, desde Hollywood medsiante una entrevista en La Gazzetta Sportiva, le pidió al presidente de la Federación Italiana que le devolviera istrativamente al Napoli a la A porque “meter al Napoli en la serie C fue un gran error de marketing por lo que representa la ciudad”.

Como todo lo del Napoli, la relación de la ciudad con el cineasta es ambigua. De Laurentiis, nacido en Roma, pero de familia napolitana, habla con un acento romano que no gusta en la ciudad. Tampoco se ayuda. Alguna vez dijo que prefería la pizza romana a la napolitana. ¡Sacrílego!

Hoy, con dos títulos, como Maradona, hasta los ultras aceptan a De Laurentiis. Queda por ver si seguirá el técnico Antonio Conte, cuyo objetivo tendría que ser buscar el éxito en la máxima competición continental. Un reto que ni aun con Maradona pudo lograr.

🚴🏻⚽🏀 ¿Lo último en deportes?: Todo lo que debe saber del deporte mundial está en El Espectador

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar