
“En La Rioja hace mucho que no estamos en condiciones dignas, las circunstancias de salubridad y hacinamiento nos generan problemas y malestar a todos, pero especialmente a los menores. Muchos de nuestros niños se están acostumbrando a vivir en la precariedad y sin garantías mínimas, y eso no puede seguir pasando”, asegura Rosamira Campo Murillo, lideresa de una parte de la comunidad embera que permanece alojada en la UPI La Rioja y quienes tendrán que ser reubicados tras una tutela que presentó la Personería de Bogotá y que acogió el...
